¿Cuantas veces te has propuesto perder peso? ¿Y cuanta has
fracasado?
Las razones pueden ser varias; poca motivación, impaciencia
por ver los resultados, poca capacidad para comprometernos con nosotros mismos
a la hora de conseguir un objetivo, la temida pereza etc.
Parece que a los pocos días de empezar un entrenamiento con
el objetivo de perder esos kilos que nos sobran, las ganas iniciales se esfuman
como si nosotros mismos las echáramos. Lo que en un principio era todo
positividad y ganas de empezar a cuidarse, de repente se convierten en excusas
que no nos llegamos ni a creer nosotros:
“Tengo poco tiempo, esto no es para mi, el trabajo/estudios
me deja muy cansado, no es el momento porque últimamente estoy muy ocupado, mi
pareja no me apoya”… la lista podría ser interminable.
Bajo mi opinión unos de los principales problemas
que aparecen cuando nos proponemos perder peso, es que debido a esa motivación de
querer cambiar nuestro cuerpo, queremos cambiar nuestros hábitos de la noche a la mañana, para conseguir los
resultados lo antes posible. Esto hace que a las pocas semanas, incluso días, estemos agotados y estresados tanto física como mentalmente.
Si no estamos acostumbrados a realizar ejercicio, no podemos
pretender correr todos los días y empezar una dieta el mismo día que decidimos empezar a perder peso.
La perdida de peso y posterior mantenimiento, como
el comienzo de cualquier tipo de entrenamiento deportivo debe ser enfocada
desde la perspectiva de una carrera de fondo y no de un sprint. Lo importante
es estar cada año mejor y no querer conseguir un cuerpazo para la boda de tu
primo que es dentro de dos meses.
Si nuestro objetivo es la perdida de peso, será mucho mas
llevadero por empezar a comer de manera equilibrada limitando la ingesta de fritos,
dulces, etc. básicamente todo lo que ya sabemos que no hace ningún bien a
nuestro resultado en la bascula. Eso si no nos dejemos llevar por dietas
milagro que nos aseguran que vamos a peder ese peso que nos sobra en pocas
semanas. Lo que pronto se va pronto vuelve. Si no sabemos que comer, lo ideal es
que nos pongamos en las manos de un profesional y nos lleve un seguimiento de
nuestro peso y nos diseñe la estrategia a seguir en nuestra lucha contra esos
kilitos demás. Pero lo más importante es no caer en el error de dejar de comer
y someternos a ese calvario de pasar horas sin ingerir ningún alimento, lo cual
empezara a estresarnos psicológicamente y su efecto será contrario a lo que en
realidad buscamos.
Nuestro cuerpo en ese aspecto luchara por nuestra
supervivencia, si no nos alimentamos, nuestro cuerpo lo reconoce como una época
de hambruna y lo que hará es atesorar esa grasa que tiene, porque es la que le
asegurara la supervivencia , con el tiempo si seguimos cometiendo este error
nuestro cuerpo se acostumbrara a gastar lo menos posible haciendo realmente difícil
quitarnos esa grasa y comenzaremos a observar que aunque comamos menos
seguiremos sin perder peso. Lo peor es que será culpa nuestra.
Lo ideal seria comer unas cinco comidas al día tres
principales (desayuno, comida y cena) y dos mas pequeñas; un segundo desayuno y la merienda. Consumir
todo tipo de alimentos potenciando frutas y verduras las cuales las tenemos
algo olvidadas en nuestra dieta diaria.
Así aseguraríamos que nuestro esta debidamente alimentado y
no le importara soltar esos kilos de grasa que le sobran, pues interpretara que
no, los necesita.
Pero aunque la dieta es importantísima a la hora de perder
peso, el ejercicio físico será lo que hará que aceleremos ese proceso, además
de proporcionarnos una serie de adaptaciones positivas para el organismo: Reducción
de la presión sanguínea, disminución de la frecuencia cardiaca en reposo,
mejoración de la función de arteria y venas, entre otras.
Para no agotarnos antes de empezar podríamos empezar con 2 u
3 días a la semana de carrera continua o caminata para ir aumentando tanto en duración
como de frecuencia semanal.
A la vez no por correr mas rápido vamos a quemar mas grasa
mas bien lo contrario; para la perdida de peso se aconseja el trabajo cardiovascular
de baja intensidad.
Como ya hemos visto en el post anterior entrenar nuestra
musculatura nos dará grandes beneficios a la hora de querer perder grasa, así
que plantéate iniciar un plan de ejercicio con pesas.
Espero haber podido serte útil con estos consejos. Y ya
sabes no quieras conseguir tu objetivo en pocas semanas, haz un compromiso
contigo mismo y plantéate seriamente cambiar tu estilo de vida, poco a poco, cada
semana un poco mas y veras que cuando te quieras dar cuenta estas mas cerca de
lucir el cuerpo que querías.
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